sábado, 3 de enero de 2015

MERMELADA DE TOMATE

La mermelada de tomate es...es indescriptible, es una de esas cosas que hasta que no las pruebas no sabes realmente lo que te has perdido; y es un alimento tan sencillo...aisss que bonito es el tomate!!

Ingredientes

Tomates
Azúcar
Limón (opcional- 5 ml)


No pongo cantidades, porque es tan sencillo como una vez pelados y cortados los tomates (sin semillas), pesarlos. La cantidad de azúcar es la mitad de lo que pesen los tomates.

Elaboración


Lavamos, pelamos los tomates y les quitamos las semillas. A veces es difícil pelarlos, basta con hervirlos en agua unos minutos con una cruz en el culete del tomate.

Añadimos el azúcar y dejamos reposar a fin de que se mezclen los sabores. Si queremos podemos añadir el limón en este paso. Ponemos en una cacerola a fuego medio primero unos minutos y subimos a fuego alto, removiendo constantemente, de lo contrario el azúcar puede quemarse y formar un espectáculo humeante tremendo (sé de lo que os hablo). A los diez minutos aproximadamente bajamos a fuego medio-bajo y dejamos hacer removiendo de vez en cuando (ya no hace falta estar encima de la olla, pero no es recomendable engatusarse en otros quehaceres mientras tenéis esto al fuego...ya os digo, sé de lo que hablo)


Este fuego habrá que mantenerlo en torno a 30-35 minutos, mirando de vez en cuando la consistencia de la mermelada. Cuando tenga ese aspecto de mermelada que todos conocemos, hay que retirar del fuego. Es mejor que quede con un poco de agua, porque el calor lo absorberá. Si no hay agua, quedará muy seca (no es que esté mala, pero es más pastosa). Dejar enfriar del todo.

Lo ideal es meter la mermelada en tarritos pequeños y consumirlos en una semana. Si se va a prolongar más, habrá que poner el tarro al baño maría durante 20 minutos mínimo para hacer esta rica conserva.

Os aseguro que es un regalo ideal para llevar cuando vas de visita.






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